Reflexiones de los antiguos alumnos de Young Strings

Joven Alumna de Cuerda, Catalina Aguirre Simmonds
“For many years, I have loved music. When I was growing up living and traveling between Dallas and Mexico, there was never a time that music was not playing. Mexican music to be exact, particularly my grandfather’s accordion music which he proudly played for us and had recorded in his many years as a working musician. When I was asked to learn violin by the music teacher at my school (Ms. Darcie Sague, who was incredible) it made sense that I accept and begin my own musical journey. When I played my first recital and realized that performing gave me a special feeling, I decided to go all in and commit to it %100. I transferred to Dealey where Mrs. Williams was the director, another Dallas educator legend, and I joined the orchestra where I would be able to play along other serious musicians. This raised my level of playing to where I was playing in anything and everything that orchestra had to offer, from paying
$1 para clases particulares (todo lo que mis padres podían pagar) a All City, All Region, y Solo and Ensemble, New Conservatory of Dallas, y GDYO.En este punto mis padres sabían que yo iba en serio y fue entonces cuando audicioné para Young Strings y fui aceptada en mi 8 º grado. Hice la audición bajo la recomendación de la Sra. Sague que estaba muy bien conectada con el mundo de la educación musical de Dallas, y estoy muy contenta de haberlo hecho. No sólo fue mi primera profesora muy amable e inspiradora, sino que me sentí orgullosa de formar parte de una organización que destacaba mi cultura y mi herencia, y celebraba el hecho de que yo fuera hispana. Esta oportunidad me abrió muchas puertas en mi carrera musical, incluyendo la posibilidad de asistir a campamentos de música en todo el país, y me presentó oportunidades de tocar para artistas en la industria de la música clásica. Recuerdo que Young Strings organizó talleres y actuaciones de músicos que estaban tocando con la DSO ese fin de semana, y organizó clases magistrales para nosotros. Aunque todas esas oportunidades fueron estupendas, la mayor ayuda que me prestó YS fue proporcionarme un instrumento de gran calidad para tocar. Estoy muy agradecida por haber podido tocar siempre con instrumentos de calidad, y me alegró mucho saber que estarían dispuestos a prestarme un instrumento cuando estudiara música en la universidad. Solo eso ya no tiene precio, porque, como todos sabemos, la calidad de un instrumento afecta a quien lo toca, y sin YS mis padres no habrían podido permitirse comprarme ese tipo de instrumento.
Siempre estaré agradecida a YS por apoyarme y ayudarme a superar la época más difícil de mi vida, sobreviviendo a la pobreza en un hogar de 8 personas, y sin embargo la época más feliz de mi vida gracias a esas oportunidades. Es la razón principal por la que enseño ahora, ya que quiero inspirar a mis alumnos para que sueñen a lo grande y no dejen que los límites socioeconómicos, culturales o sociales les impidan cumplir sus sueños. Fui profesora de violín de YS durante varios años antes de mudarme a Oklahoma con mi familia. El propósito de Young Strings era diversificar las orquestas de todo el mundo, pues bien, me enorgullece decir que he actuado con la Sinfónica de Las Colinas, el Ballet de Tulsa, la Orquesta Sinfónica de Tulsa, la Sinfónica del Noroeste de Arkansas, y también toco en una serie de conciertos a la luz de las velas que presenta un cuarteto de cuerda que interpreta música con diferentes temas. Muchas veces mis experiencias con YS me han preparado para una vida en la música clásica, estoy muy orgulloso de llamar a YS y a la DSO mi hogar sinfónico, ¡y siempre lo gritaré a los cuatro vientos!".